21.6.10

Risotto de verduras






He decidido unirme al círculo Whole Kitchen y en su primera propuesta salada para el mes de junio ha pedido que cocinemos un risotto de verduras, todo un clásico de la cocina italiana. Yo he procurado hacerlo ciñéndome lo más posible a la receta que aconseja el blog, aunque hay algún ingrediente que no he utilizado, como las judías, las zanahorias y el vino blanco, ya que daban libertad para el uso de ingredientes, siempre que fueran verduras. Es un plato que he de decir he hecho solamente tres veces con esta.

El risotto es un plato exquisito y que cada vez está más de moda, aunque para mí nuestros arroces no tienen nada que envidiarle. Pero yo soy de la opinión de que, aunque tenemos que conservar nuestras tradiciones culinarias, ya que viajando por distintos países he aprendido que nuestra cocina es una de las mas variadas del mundo, hay que estar abiertos a cocinas de otros países que también tienen platos deliciosos y no pensar que lo nuestro es lo mejor.

Paso a exponer como hice el risotto y espero que si alguien hace la receta le guste tanto como me ha gustado a mí.

He de aclarar que yo el que hice fue para dos personas, por lo que reduje los ingredientes a la mitad.

Según nos informa Whole Kitchen estos son los 5 pasos importantes que hay que tener en cuenta para un buen risotto:

1. Sofrito
Cortaremos las verduras seleccionadas para la receta en cuestión, según hayamos picado la verdura más o menos fina, nos proporcionará un aroma más intenso o menos, cuanto más fina esté picada, mayor será el perfume. Elegiremos entre una buena mantequilla o aceite para sofreír las verduras, y cuando el aceite esté caliente las añadiremos y las dejaremos sudar suavemente.

2. Tostado del arroz
El mejor arroz para realizar el risotto es el específico indicado para ello o arroz arbóreo, él cual añadiremos al refrito y lo mezclaremos con él, hasta que se impregne bien y adquiera un tono casi transparente. Este paso es muy importante ya que es aquí donde el arroz suelta su almidón dando la consistencia cremosa al risotto.

3. El vino
Añadiremos el vino en la cazuela el cual puede ser blanco seco o tinto, moveremos bien, y subiremos la temperatura de la cocción para que se evapore y volveremos nuevamente a la temperatura inicial. Yo, he de decir que no he puesto vino.

4. El caldo
Este es un punto muy importante para el éxito de un buen plato de risotto, dependiendo del tipo de risotto que vayamos a cocinar el caldo será de carne, verdura o pescado, etc. el cual iremos añadiendo poco a poco, cada vez que vayamos viendo que el arroz lo va absorbiendo, y siempre sin dejar de remover, hasta que veamos que el arroz está en su punto ni duro ni pasado, normalmente suele tardar unos 15 minutos aproximadamente.
Algo muy importante es que el caldo que vamos añadiendo debe de estar caliente, si estuviese frío nos rompería la temperatura de cocción de los alimentos, así que debemos de tenerlo previamente calentado.

5. El mantecado
Mantecar es añadir mantequilla o aceite y el queso a la preparación, esto será lo que nos dará el toque final al risotto el cual nos dará una textura melosa. Aquí ya habremos retirado la olla del fuego y añadiremos la mantequilla y el queso y mezclaremos suavemente hasta que se derritan, lo dejaremos reposar tapado con un paño unos 2 ó 3 minutos. Y ya estará listo para servir.

El queso que utilicemos es mejor si lo rallamos en el momento y su cantidad es de unos 15 gr. aproxidamente por persona


  • Ingredientes:
400 gr. de arroz arborio para risotto
1 y ½ litro de caldo de pollo
125 gr. de mantequilla
1 puerro picado muy fino
2 cebollas picadas muy finas
2 dientes de ajo muy picados
100 gr. de puntas de espárragos verdes troceados
100 gr. de guisantes
Perejil
Cebollino
Pimienta negra
80 gr. de parmesano recién rallado
Sal



  • Preparación:
Poner el caldo al fuego lento, y mantenerlo caliente pero sin que llegue a hervir. Derretir en una cazuela la mitad de la mantequilla y añadir, los ajos, el puerro troceado fino, el cebollino troceado, y las cebollas, rehogar a fuego lento hasta que esté todo tierno y transparente, una vez conseguido este punto, añadir el arroz y saltearlo 1 minuto.

Ir añadiendo el caldo poco a poco, siempre removiendo con cuidado y esperando que el arroz absorba casi todo el líquido antes de añadir más. No debe hervir a borbotones ni tampoco quedar demasiado seco.

Pasados 5 minutos añadir los espárragos y los guisantes y dejar cocer hasta que las verduras estén listas y el arroz cremoso. Tiene que quedar “al dente”.

Añadir sal y pimienta al gusto, incorporar la mantequilla y el perejil picado y remover con suavemente. Incorporar al risotto el queso y remover nuevamente con mucho cuidado. Tapar la cazuela y dejar el risotto un par de minutos en la cazuela antes de servir.