Aunque ha finalizado el verano, pongo esta receta en el blog porque todavía os puede apetecer tomar cosas que no sean los típicos platos de cuchara que apetecen cuando hace frio. De todas formas, si en la zona donde vivimos no hace demasiado frio podemos tomar este plato en cualquier época.
Este es un plato que nos puede servir tanto como entrada en la mesa, o como aperitivo. Es muy refrescante y si os gusta el sabor del pepino os aseguro que os gustará mucho, está muy rico.
No pongo cantidades porque estas dependerán de la cantidad de comensales que vayamos a tener. La mezcla del relleno la haremos de forma que tengan más atún que el resto de ingredientes. Pero bueno, esto es un poco a nuestro gusto.
Lo que sí es importante es que si lo vamos a tomar de aperitivo hay que procurar que los pepinos no sean grandes para poder comerlos con la mano.
Os dejo el enlace de otra receta de pepinos rellenos que tengo en el blog, "Pepinos rellenos de ensaladilla de gambas".
Os dejo el enlace de otra receta de pepinos rellenos que tengo en el blog, "Pepinos rellenos de ensaladilla de gambas".
- Ingredientes:
Atún o bonito en aceite de oliva virgen extra
Cebolleta
Aceitunas sin hueso
Mayonesa
- Preparación:
Lavamos y secamos los pepinos. Les cortamos los extremos y cortamos cada pepino en trozos de 2 cm. cada uno. Los vamos vaciando por dentro, sin llegar al final para que el relleno no se caiga al cogerlo, la carne del pepino la reservamos para ponerla en el relleno. Añadimos un poco de sal y los dejamos boca abajo en un escurridor, para que suelten líquido, unos veinte minutos. Pasado este tiempo, los vamos poniendo en la fuente, o en cada plato, según donde los vayamos a servir.
En un bol vamos poniendo el atún troceado y las aceitunas, la cebolleta y el relleno que hemos quitado de los pepinos, todo ello picado muy finamente. Añadimos mayonesa hasta que veamos que nos queda bien integrada y sin que el relleno quede caldoso.
Con una cucharilla vamos rellenando los trozos de pepino, y cuando tengamos todos preparados los metemos en la nevera hasta el momento de servir.