Esta tarta que os presento hoy, es la típica receta de aprovechamiento de los restos que quedaron de la comida del día anterior. Se me ocurrió porque, aunque yo había preparado los dos platos, no había comido en casa, y al decirme mi marido que él lo había comido todo junto, y que estaba muy rico, por no repetir lo mismo, pensé en preparar una tarta con lo que había sobrado.
El resultado ha gustado mucho, pues es una tarta con mucho sabor, que acompañada con una ensalada es un plato único muy completo.
Como veréis, en los ingredientes y en la preparación, os remito a las dos recetas que tengo en el blog de las berenjenas con jamón y del ragú.