26.5.15

Falafel






Este aperitivo o tentempié lo probé por primera vez en Jordania, y después cuando he ido a otros países de Oriente Próximo lo volví a tomar y me encantó. Entonces decidí buscar una receta para poder hacerlo yo en casa alguna vez y la encontré en un libro que tengo de cocina de Egipto.

El faláfel o falafel es una croqueta de garbanzos o habas cuyo origen se remonta a los tiempos de la Biblia y se originó en algún lugar del subcontinente indio. Actualmente, las tendencias culinarias han provocado el triunfo del faláfel de garbanzo sobre el faláfel de haba.  Se come en India, Pakistán y Oriente Medio a cualquier hora del día.

Las habas o los garbanzos empleados no son cocinados. Se ponen en agua hasta que se ablandan, unas 24 horas, y luego se trituran para formar una pasta. Con esta pasta se hacen unas bolas redondas o achatadas que se fríen en abundante aceite y se pueden tomar hasta un par de días después si sobran. Los garbanzos, o las habas deben de estar hidratados, no cocidos.

Tradicionalmente se sirve con salsa de yogur o de tahina, así como en sándwich en pan de pita, o como entrada.


  • Ingredientes:
250 gr. de garbanzos secos
1/2 cebolla
1 Cebolleta
2 dientes de ajo 
1 manojo de perejil fresco
1 cucharada de cilantro fresco
Pimienta negra recién molida
1 pizca de pimienta de cayena
1 pizca de bicarbonato
1 cucharadita de comino molido o en grano
1/2 cucharadita de canela en polvo
Sal
Harina de garbanzos para rebozar (en su defecto normal)
Aceite de Oliva Virgen Extra

* Las cantidades de las especias las podemos variar a nuestro gusto.






  • Preparación:
Los garbanzos los pondremos en remojo unas 24 horas. Deben estar tiernos, pues se trituran sin cocer. Cuando estén tiernos los escurrimos y retiramos la piel, aunque si lo trituramos bien puede no notarse. Como lo hice con la Thermomix no me hizo falta quitarla

Ponemos los garbanzos, la cebolla, la cebolleta, los ajos y el perejil en la batidora o la Thermomix y trituramos hasta obtener una masa uniforme. Añadimos el comino, el cilantro, la pimienta de cayena, la pimienta negra y la sal y volvemos a triturar. Debe quedar una masa maleable no demasiado triturada.

Espolvoreamos la pasa con una pizca de bicarbonato, mezclamos bien y pasamos la pasta a un cuenco para dejarlo reposar en el frigorífico una hora.

Pasado este tiempo daremos forma al falafel. Podemos hacer bolas, hamburguesas o croquetas. Cuando les hayamos dado forma rebozamos con la harina de garbanzos y freímos en abundante aceite hasta que estén doradas y crujientes.

Al retirar el falafel de la sartén, lo vamos poniendo sobre papel absorbente para desechar el exceso de aceite.