El goulash, o gulash, es un plato originario de Hungría, que luego se ha extendido a otros países del centro de Europa como la Republica Checa, Eslovaquia, Eslovenia, Los Balcanes etc.... Hay una gran variedad de gulash dependiente de la región donde se cocine.
En un plato elaborado a base de carne, cebollas y pimentón. Es como un ragú, pero que si está muy caldoso puede ser una sopa. Es una receta de gran sencillez y de origen humilde.
Se utiliza carne de vacuno, generalmente “carne de segunda”, es decir cortes baratos, tiene que ser una carne tierna y jugosa.
El gran secreto del gulash es el tiempo de cocción, que puede durar entre dos horas y dos horas y media, dependiendo de lo tierna que sea la carne. Esta cocción larga y lenta es lo que hace que estas carnes terminen resultando de una textura exquisita.
Este plato la primera vez que lo probé fue en Praga y me pareció muy sabroso. Aunque el comino y el vino son opcionales yo siempre pongo ambos ingredientes porque creo que le da un sabor especial. Es importante que el vino no sea muy corriente.
Se puede acompañar con patatas y pan.